Directores que apuestan por la felicidad en sus empresas

Cada nuevo caso de éxito que conozco me anima a continuar con las entrevistas a directores que apuestan por la felicidad en sus empresas, ya que sus experiencias nos confirman que la clave para lograr los mejores resultados en los negocios está precisamente en cómo de bien hagan sentir a sus empleados.

En esta ocasión, os ofrezco la entrevista que grabé a Sergio Garbín (disponible en vídeo adjunto), director general de Essence Group España, que ofrece soluciones inteligentes, a través del IoT, para proveedores de servicios de seguridad, comunicación y de teleasistencia.

En este resumen, destaco los puntos más destacables de la entrevista así como también lo que conversamos fuera de cámara, y que nos permitió conocer mejor su estilo de liderazgo cercano a las personas y comprometido con los resultados.

Sergio es ingeniero de Sistemas de Información y cuenta con una larga trayectoria profesional como director de proyectos con equipos internacionales. Está convencido de que los éxitos en su carrera se deben a su interés por las personas, a entender la parte emocional y motivacional de sus colaboradores.

¿Te perdiste las entrevistas anteriores?

• Entrevista a Miguel Ángel García Monge, director de operaciones de posventa en Hyundai Motor España.
• Entrevista a Cristina Burzako, Directora de Comunicación y Marca de Teléfonica España.
• Entrevista a Luis Guerra, director general de Vasalto.

Antes de que se hablara de felicidad en las empresas, su marcada orientación hacia las personas le llevó hace tiempo a formarse en coaching ejecutivo, y a desplegar las actitudes del líder-coach. Lo hizo con el claro propósito de adquirir técnicas y herramientas que le permitieran escuchar, empatizar, impulsar y desarrollar a las personas. Para que “éstas se puedan sentir realizadas personal y profesionalmente, que es desde ahí desde donde se potencia el negocio”.

Empezó afirmando que una empresa feliz se construye a partir de la felicidad de cada uno de los trabajadores que la integran, y que son las propias compañías las que tienen que implantar diferentes estrategias para conseguir ese objetivo de felicidad y mejorar el bienestar. Es precisamente eso lo que hoy en día marca la diferencia competitiva, y lo que permite tener el compromiso del equipo.  La tecnología está al alcance de todas las empresas, pero el mayor diferencial es sin duda el valor de su capital humano.

Nos dijo que “las empresas necesitan promover y facilitar las condiciones organizacionales para el bienestar psicológico y potenciar las fortalezas de las personas y los equipos de trabajo”. Entre las PRÁCTICAS QUE LE AYUDAN A ALCANZAR EL OBJETIVO DE FELICIDAD en su Organización, nos apuntó lo siguiente:

• Estar cerca de la gente, saber cómo se sienten, cómo piensan, conocer sus verdaderas motivaciones y preocupaciones.
• Anticipar cómo van a reaccionar ante los cambios o decisiones que puedan ser complicados de entender, porque no siempre las noticias son positivas.
• Generar confianza y seguridad psicológica, aceptando los errores y aprendiendo colectivamente de los fracasos.
• Potenciar que se exprese gratitud y reconocimiento y se celebren los éxitos profesionales.
• Pensar en el beneficio del equipo, antes de tomar una decisión, y a partir de ahí analizar las demás variables.
• Definir claramente las tareas y los objetivos para permitir que las personas se identifiquen con la empresa y encuentren sentido al esfuerzo diario.
• Fomentar la empatía y el buen humor y ofrecer actividades de ocio fuera de la empresa para crear un buen ambiente de equipo.

Preguntándole acerca de los BENEFICIOS DE LA FELICIDAD ORGANIZACIONAL, nos apuntó aspectos muy interesantes, como son el incremento de la creatividad e innovación; la retención del talento; y la mejora de la imagen de marca.

“Cuando las personas nos encontramos a gusto y felices en nuestro día a día, no buscamos fuera lo que ya tenemos en casa, por tanto, las relaciones naturalmente se vuelven sostenibles en el tiempo.  Cuando una persona es feliz, el cerebro funciona mejor, se libera una gran creatividad que facilita la resolución de problemas complejos. Además, la felicidad es contagiosa. Esto significa que cuando un empleado está contento, los demás empleados que lo rodean es más probable que se sientan también felices. Y todo ello favorece la retención del talento”.

“Un empleado contento con su entorno, con sus compañeros y su jefe, se convierte en el mejor embajador de la marca y se consigue el compromiso de la gente de manera natural. El retorno lo vemos en el buen resultado de los proyectos”.

Invertir en FORMACIÓN PARA LA FELICIDAD ORGANIZACIONAL

La formación en felicidad organizacional tiene sentido para Sergio G., porque hoy en día los directivos tienen muchas competencias técnicas, pero hacen falta las competencias soft, lo que se entiende por habilidades que permiten entender y comprender las emociones y motivaciones de las personas y que se puedan sentir parte de “nuestra tribu”.

Hay estudios que determinan que un trabajador feliz, optimista con su cometido profesional, rinde casi un 65% más en su trabajo. Esto conlleva una espiral positiva que deriva en un claro incremento de la productividad y, por consiguiente, dota a la empresa de mucho más valor. Esta espiral hace que este tipo de trabajadores sean también los más recompensados, lo que redunda de nuevo en más productividad y mayor vinculación a la empresa. Hoy en día es importante retener el Talento Humano, y no solo se retiene por el salario, sino también -y es casi más importante que los profesionales se sientan realizados y participes activos del proyecto empresarial-, y si esto se logra, el compromiso de las personas es natural y genera un círculo virtuoso positivo que marca la diferencia.

No cabe duda de que las emociones se contagian, y una persona que se encuentre a gusto en su trabajo y sea feliz acabará dando lo mejor de sí misma en el desarrollo de sus habilidades. Esto se traducirá en un ambiente óptimo para que se fomente la actitud positiva en el resto del equipo: menor absentismo frente a mayor energía, productividad y compromiso.

El director general como “director de felicidad”

Ahora que hay plataformas de empleo como Glasdoor y otras similares, donde los trabajadores expresan opiniones sobre sus empresas, Sergio G. está convencido de que los directores serán mejor valorados en ellas cuando en lugar de implantar solo estrategias cortoplacistas -en busca de resultados rápidos-, tengan más en cuenta a las personas.

Por esa razón, cree que la formación específica en materia de felicidad empresarial -que se está ofreciendo en estos momentos por consultores especializados- es de gran valor y tiene más sentido cada día.  Todo lo que ayude a potenciar las habilidades que permiten entender más la parte emocional y motivacional de los trabajadores, contribuyen al objetivo Felicidad Empresarial.

También opina que un directivo que trabaja la felicidad de sus colaboradores, no solo consigue mejorar los resultados de la empresa sino que en su caso personal impacta en su propia felicidad, ya que él no concibe otra forma distinta de trabajar que no sea poner al empleado en el centro.

Para acabar este resumen, extraigo de sus palabras que la felicidad de los equipos también contribuye a mejorar la RSC de la empresa, ya que ésta no solo ha de enfocarse al exterior, sino hacia adentro y trabajar en mejorar la felicidad de los empleados.

Como empecé diciendo, la misión corporativa de Essence Group es la seguridad y bienestar de las personas en el hogar, y nada mejor para los empleados que trabajan en la empresa que contar con un director que también se ocupa de su BIENESTAR. Un binomio perfecto que se merece nuestro reconocimiento. Muchas gracias Sergio por el tiempo que nos has dedicado, y por ayudarnos a difundir el nuevo paradigma de felicidad en las empresas que desde la Asociación de Directores de la Felicidad -DIRFEL- promovemos.

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